martes, 2 de diciembre de 2008

Analisis de coyuntura: segundo semestre 2008

En base a la actual realidad política, social y económica, se hace pertinente analizar y caracterizar el proceso manifestado y experimentado tanto por el bloque en el poder como por el movimiento estudiantil en el último semestre. Nuevamente nos encontramos en un momento lleno de situaciones complejas y problemáticas producto de una nueva ofensiva del bloque en el poder, a propósito de la correlación de fuerzas positiva que han generado en términos legales, sociales y represivos. Por lo demás se hace necesario reconocer las debilidades del movimiento estudiantil en relación a su poder, a su unidad y a su capacidad de articulación. Precisamente nuestra intención no pasa única y exclusivamente por una descripción objetiva de los hechos, si no más bien por desarrollar una propuesta que nos permita superar nuestras flaquezas como movimiento y construir un poder estudiantil que sea capaz de hacerle frente a las intenciones del bloque en el poder, en vías a la concreción de nuestras demandas.

Cuando se duda del modelo las coaliciones se alinean.

El principal antecedente que demuestra la ofensiva del bloque en el poder en torno al fortalecimiento de las políticas neoliberales, es la capacidad de consenso y resolución mostrada por las distintas coaliciones parlamentarias, comprendidas como la Concertación y la Alianza, en cuanto a la aprobación de la nueva Ley General de Educación “LGE”.

Esta ley, mostrada mediaticamente como un avance en torno a las políticas sociales y al dialogo participativo y democrático en el chile “moderno e inclusivo”, en lo concreto, viene a ser exactamente lo mismo que la antigua LOCE, intentando dejar atrás el fantasma de la dictadura militar, siendo un cambio de forma pero no de fondo. La única diferencia sustancial entre la LOCE y la LGE, es que esta última hace una superficial declaración de principios, con una aparente pretensión reformadora, pero cuyo trasfondo reproduce la lógica neoliberal. Es decir, la educación sigue siendo concebida como un servicio al cual se accede por medio del dinero, despojando a las mayorías de su derecho a educarse digna y gratuitamente.

Otra problemática importante vinculada a la arremetida del modelo es el tema del transporte y la tarjeta nacional estudiantil. Si bien ya es cotidiano levantar año a año la reivindicación de derogación y/o modificación de los decretos 20 y 45 que regulan los recorridos, horarios y tarifas del servicio de transporte, en el último periodo se ha manifestado la negativa absoluta desde el gobierno y el empresariado del transporte. A pesar de las mesas de negociaciones caracterizadas por la imposición y la ineficiencia para las demandas estudiantiles, los acuerdos mínimos sobre los criterios del transporte estudiantil no han sido respetados y en lo concreto se mantienen las mismas problemáticas iniciales al momento de plantear las demandas en la movilización. La TNE efectivamente es de carácter nacional, pero no da solución a los problemas de tarifa y horario, rompiendo con los fundamentos básicos de la creación de esta misma. Resulta clarificador el hecho de que se genere nuevamente un subsidio al empresariado del transporte para dar solución a la problemática de las tarifas, haciendo explicito nuevamente el carácter subsidiario del estado y el fortalecimiento del esquema neoliberal en la actualidad, corroborando la tesis de que las políticas sociales quedan a merced del mercado.

Crisis educacional: ¿Autofinanciamiento o administración?

En cuanto al financiamiento de la educación, cada vez se hace más latente y aguda la crisis. La problemática provocada por la absoluta libertad del sector empresarial para invertir y lucrar junto a la voluntad irrestricta del gobierno para privatizar las instituciones estatales ha producido un sistema de competencia entre lo público y lo privado. A nivel de la educación básica y secundaria se experimenta la dureza de la municipalización en cuanto la distribución de recursos a través de una administración local, sin proyección nacional y con una realidad diametralmente opuesta dependiendo del municipio y del tipo de establecimiento educacional en cuestión. Por lo demás, se financia a instituciones privadas de la misma forma que a las públicas, siendo Chile uno de los únicos países en aplicar dicha política publica. De esta manera, la desvinculación del estado de los establecimientos educativos se hace cada vez más palpable a propósito de dichos fenómenos. Las instituciones municipales públicas quedan muy por debajo de las particulares, haciendo entender que la proyección que se entrega a los estudiantes también es diametralmente opuesta, a propósito de su poder adquisitivo y de su futuro rol productivo.

Las universidades públicas viven un proceso de crisis, en distintos niveles, en base a la necesidad de recursos económicos y al autofinanciamiento. Desde que el estado se desvincula de su responsabilidad total con las instituciones de educación superior comienza a surgir el autofinanciamiento como medida de superación para hacer frente a la competencia y a la flaqueza económica. En esta situación, las universidades crean nuevas carreras de barata infraestructura, poca proyección laboral pero de alta demanda, aumentan constantemente los aranceles y aumentan los cupos de las carreras aunque no estén en condiciones de hacerlo. Este año ha sido un momento culmine para varias universidades del país con problemas de acreditación, endeudadas con la banca y con situaciones irregulares y de corrupción. El Aporte Fiscal Directo (AFD) es extremadamente reducido, no supera el 20% del presupuesto total, y el Aporte Fiscal Indirecto (AFI) viene a elitizar la entrega de recursos puesto que es mayor para las universidades que se llevan los mejores puntajes, en relación al financiamiento de la educación superior. El gobierno no se hace irresponsable por dicha crisis y termina responsabilizando a la mala gestión a cada institución, desconociendo nuevamente su verdadero rol social. De hecho, tanto Yasna Provoste, controvertida ex ministra vinculada a ilícitos administrativos, como Mónica Jiménez, han dejado claro en sus pronunciamientos que el sistema en la actualidad funciona con buena gestión en términos ideales, y que las situaciones problemáticas o conflictivas son responsabilidad de la comunidad universitaria.

No es para nada extraño reconocer a estas alturas del año que efectivamente ha sido un periodo de gran complejidad para los estudiantes del país, caracterizado por la carencia de una articulación reivindicativa y por la inexistencia de nexos de comunicación que generaran una correlación de fuerzas positivas a la interna del movimiento. El despliegue de los estudiantes que se movilizaron primero en sus planteles universitarios, fue desarrollándose de manera parcelada, paulatina e inconstante. A nivel secundario se desarrolló algo más unificado pero que tampoco pudo generar referentes o grandes concentraciones más allá de la movilización en conjunto con los profesores que fueron convocados a lo largo de todo el país, todo esto, frente a la posible aprobación del proyecto de la LGE y de la gran cantidad de Universidades en crisis financiera a lo largo del país. Uno de los principales problemas que no pudieron resolverse de manera eficiente fueron los relacionados a las condiciones temporales de la movilización. El proceso de lucha estudiantil tuvo alrededor de tres momentos de agudización y tres momentos de baja, por lo que no hubo capacidad de articulación, todo esto junto a la múltiple diversidad de demandas que fueron levantadas.

El bloque social y la canalización reformista.

Agotadas las movilizaciones por parte de los estudiantes por el congelamiento de la tarifa, por el rechazo a la LGE y la derogación de la LOCE, casi sincronizadamente el gremio liderado por Jaime Gajardo levanta un paro por el “fortalecimiento de la educación publica” a horas de firmarse la aprobación de la LGE por la cámara de diputados. Ante esta emergencia, la concertación, para asegurar los votos por el pacto en educación firmado con la alianza y evitar la prolongación del paro, posterga la votación para el día siguiente donde por mayoría absoluta se aprueba la nueva ley por parte de los diputados. No pasa mucho tiempo para que el colegio de profesores convoque a un nuevo paro junto con la CUT, aprovechando la coyuntura en el parlamento por el veto a la ley. Esta vez la movilización alcanzo menos adhesión y cobertura mediática y probablemente no se convoque otra de esta magnitud hasta la aprobación total de la ley. (como finalmente ocurrió, N.E)

No es casualidad que la directiva del colegio de profesores convoque a una nueva jornada de movilización. Puede ocurrir que el Partido Comunista, ante la negativa de reformar el sistema electoral (como se afirma en la declaración leída por Gajardo: “Reforzar el binominal, vinculación con la LGE; (…) para hacer reformas sociales hay que hacer reformas políticas” ) por parte del parlamento, despliegue todas sus bases sociales para causar un ambiente de descontento, canalizado por las pocas direcciones que le quedan a este partido, y de este modo darle un temporal dolor de cabeza al gobierno, dolor que no tiene otra proyección que poner sobre el tapete político intereses reformistas conforme con el marco jurídico-legal burgués. (lo que finalmente no ocurrió N.E.)

En cuanto a la participación de la CUT. Si la movilización cuenta con el apoyo de dicha instancia sindical, por un lado se reafirma la calidad de “representante de los trabajadores”, puesto que, hasta el momento, se habían sumado numerosos gremios públicos y privados a la movilización, y por otro, con Martínez a la cabeza todo es mas fácil para el bloque en el poder si es que las aguas se mueven mas de lo debido; así el dialogo y el “nuevo congreso por mas y mejor educación publica” es en parte seguro y favorable para los de arriba, y en el peor de los casos para provocar confusiones entre el mismo bloque social. Esta presencia y canalización de la burocracia sindical dentro del movimiento de seguro beneficiará la correlación de fuerzas para ligar el “Segundo proyecto por el fortalecimiento de la Educación publica”, liderado por la nueva ministra Mónica Jiménez, al congreso proclamado por el gremio de profesores. De todas maneras, la masiva movilización se inscribe en el actual periodo de reactivacion del movimiento popular, dando un paso en la conciencia del profesorado de base.

Hacia la unidad y claridad política en el movimiento estudiantil y popular.

Los puntos en discusión en términos del horizonte de la lucha estudiantil fueron la democratización, el financiamiento, TNE y LGE, que si bien están conectados, existe una mayor importancia evidentemente de lo relativo a los temas estructurales vinculados al modelo. Lamentablemente dicha premisa no fue asumida inicialmente y se asumió dicha perspectiva de manera tardía, ya que algunos asumían el tema de la TNE y de las reivindicaciones internas como lo definitivo, dejando de lado la LGE y la crisis de financiamiento de la educación superior. Finalmente como se ha dicho, se hegemoniza lo relativo a la LGE, por una cuestión de coyuntura de agitación desde variados sectores sociales, evidenciando la incapacidad de los Zonales que no fueron capaces de generar consensos ni directrices mínimas más que convocatorias a movilizaciones, aunque a nivel de CONFECH se manifestaban acuerdos que a decir verdad representaban solamente a quienes se desempeñaban en las instancias de conducción política universitaria.

El avance que podríamos vislumbrar, en el actual periodo de luchas, en torno al movimiento social vinculado a la educación, ha sido, y continuara siendo, la articulación con la que se movilicen las distintas organizaciones representativas de los actores involucrados. Los estudiantes secundarios, los universitarios, los académicos y no académicos, debemos comprender que la victoria a nuestras demandas no caerá por voluntad del gobierno y los “políticos profesionales”, sino que será conquistado única y exclusivamente por la movilización conjunta y articulada, ya que como la experiencia nos ha demostrado, este modelo no cederá conscientemente para dar paso a nuestras demandas.

El camino que tenemos por delante es largo, y nuestras tareas como organizaciones político-sociales lo son aun más. Al movimiento vinculado a la educación, como el movimiento popular en su totalidad, le quedan muchas batallas por dar, muchas victorias y derrotas por vivir, pero al final de cuentas, el avance está en la experiencia que nos aporten tales luchas a nuestras organizaciones sociales, a la conciencia de las bases, a la politización del movimiento popular. Estos avances debiesen abrir las puertas a las proyecciones de las movilizaciones de todos los que luchan por dignidad, clarificando que la base de todas las problemáticas sociales están enmarcadas en el desarrollo del imperialismo en nuestro país y la imposición del modelo capitalista de corte neoliberal.

Por el momento debemos continuar fortaleciendo las organizaciones sociales y los referentes de coordinación mediante prácticas libertarias, levantando programas coherentes de articulación social y apostando por la formación de sujetos sociales, siempre amparando como premisa la unidad de los sectores, superar el gremialismo, la burocracia y la mediocridad política, asegurando el libre camino para la voluntad popular.

¡ Porque el Modelo No Cederá, Avanzar en la Lucha Popular !

ARRIBA LOS QUE LUCHAN

La crisis del modelo neoliberal en Chile

La crisis del modelo neoliberal en Chile


1. ¿Qué es el Neoliberalismo? El neoliberalismo es una etapa del desarrollo del imperialismo, que se instaura en nuestro país con la dictadura militar para remplazar a la etapa capitalista anterior, el desarrollismo, que impedía a los grandes capitalistas mantener el ritmo de sus ganancias.De lo anterior puede deducirse que con el neoliberalismo:

Se le otorga al sector privado la libertad absoluta de hacer en función de sus intereses.

Se privatizan las empresas del Estado y se incentiva la apertura del mercado nacional al exterior, modificándose la matriz productiva industrial, pasando a la exportación de materias primas.

Desaparece el Estado "protector", transformándose en "subsidiario" con el consiguiente abandono progresivo de las políticas sociales, bajo el argumento de que el libre funcionamiento del mercado resolvería los problemas de la pobreza.

Se plantea que la población ya no debe recurrir al Estado para demandar sus derechos sociales, sino al mercado, pero la única manera de acceder a éste es por medio del poder adquisitivo.

2. El neoliberalismo como estrategia de desarrollo En el neoliberalismo, el crecimiento económico (la riqueza producida por todos) se redistribuye a la sociedad a través del "chorreo", es decir, el beneficio indirecto que reporta a los trabajadores y al conjunto del pueblo las utilidades de los empresarios, lo que "idealmente" repercutiría en mejores salarios o en mayor inversión y, por consiguiente, en generación de empleo.

Para que haya crecimiento económico, en un sistema de economía primario exportadora, es necesario que el Estado genere condiciones favorables para que la burguesía intervenga en el mercado internacional con ciertas ventajas comparativas (menores costos de producción y mayor venta en el extranjero al ser mucho más baratas las cosas producidas).Fue la dictadura la que crea estas condiciones, a partir de la flexibilización de las leyes laborales, la limitación de la negociación colectiva y la sindicalización, el establecimiento de sueldos mínimos de hambre, etc; políticas que fueron continuadas por los gobiernos "socialistas" de la Concertación con el beneplácito de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). Otras políticas implementadas fueron en materia de comercio exterior, que se plasmó en la eliminación de los aranceles aduaneros y la celebración de un sinnúmero de Tratados de Libre Comercio (TLC) lo que ha repercutido fuertemente incluso en las PYMES (Pequeñas y Medianas empresas) y las Mini-PYMES que son a fin de cuentas los que generan el 80% del empleo.
Estos dos modelos empresariales mencionados han sobrevivido a pesar de la arremetida de los TLC, pero lo han hecho a costa de salarios de hambre que pagan a los trabajadores y la inestabilidad en el empleo que generan.Los efectos de la política del chorreo han sido devastadoras en términos de distribución de la riqueza y han generado la enorme brecha existente entre ricos y pobres ; veamos el siguiente ejercicio:En una economía abierta, si eventualmente los precios internacionales de venta bajan, existen dos posibilidades, o los empresarios disminuyen la tasa de ganancia para mantener la competitividad o se disminuyen los salarios reales. En este último caso, el problema consiste en quién paga el costo del ajuste... y si es al revés, en quién aprovecha el mayor excedente. En el primer caso, habrá presiones evidentes por parte del capital para mantener o deteriorar la redistribución actual (menos salarios, despidos, etc); y si los precios marcha al alza, nada garantiza que la redistribución mejore, salvo la filantropía patronal o la presión de los trabajadores.

3. En Chile, la redistribución de la riqueza es imposible La crisis del neoliberalismo como "estrategia de desarrollo" se manifiesta en la enorme brecha distributiva entre ricos y pobres que condena a miles de chilenos a la miseria. Los instrumentos para redistribuir la riqueza que producimos todos, se realiza mediante la aplicación de la política del gasto social y la política laboral, en otras palabras, las condiciones de compra-venta de la fuerza de trabajo, que repercuten en el salario y el empleo.

3.1 El gasto social: El gasto social es lo que el gobierno invierte en los servicios de primera necesidad. Con el alto precio del cobre, el dinero en el bolsillo estatal creció (superávit fiscal), con lo que el gobierno aumentó el gasto social. El objeto de este aumento fue la urgencia de apagar el incendio de conflictos sociales que estallan todos los días. Si no hubiera habido aumento del precio del cobre no habría aumento del gasto social, con lo que la situación política se agravaría (para ellos).

Por otra parte, los resultados de las políticas sociales han sido espantosos. La última encuesta CASEN, "encuesta oficial", establece que la pobreza ha bajado en los últimos 12 años. Sin embargo, para llegar a este cálculo, los tecnócratas fijaron el mínimo de sobrevivencia en "40 mil pesos mensuales" cuando para que una persona pueda vivir en Chile requiere $130.000 pesos mensuales... esto significa que el 80% de los chilenos es pobre. No se puede hablar de un "fracaso de la política social" ni mucho menos de "victoria contra el flagelo de la pobreza" como señalan Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, porque dentro de los marcos neoliberales no existe política social: la manipulación grosera de las cifras se condice con los programas sociales de control, de premio y de castigo focalizado.Con política laboral nos referimos a las condiciones concretas para la compra-venta de la fuerza de trabajo.

3.2 La política laboral
1. La normativa laboral como instrumento de ACUMULACIÓN y no de DISTRIBUCIÓN

En el actual orden neoliberal, los trabajadores se encuentran sin instrumentos legales y eficaces para negociar en condiciones favorables la venta de su fuerza de trabajo.Sin embargo, en los últimos 4 años las movilizaciones de los sectores estratégicos (las que producen mayor riqueza en el país como los mineros, los portuarios, los forestales, los salmoneros, las temporeras, entre otros) han revertido esta situación por la vía de la acción directa de masas, con lo que han superado los estrechos marcos legales y han negociado en condiciones más favorables la venta de su fuerza de trabajo. Estos "hechos" ha llevado a los de arriba a ponerse al día y preparar la ofensiva y volver a sus carriles el incipiente movimiento de los trabajadores combativos y corregir esta forma "ilegal" de redistribuir la riqueza que acumulan a destajo los monopolios imperialistas nacionales y extranjeros.
2. El Sueldo Mínimo

Este instrumento ha servido para "compensar" la prácticamente inexistente negociación de las condiciones laborales en Chile. Este comodín pasó de $135 mil a $140 mil pesos, mientras la CUT pataleaba porque el gobierno y la burguesía no consideraban su propuesta chanta de subir el salario mínimo en $15 mil pesos anuales, hasta llegar a los $180 mil al final del mandato de Bachelet en el 2010.Sobre el sueldo mínimo y su carácter de hambre han aparecido posiciones: los empresarios han emprendido una campaña, desde la Cámara de la Producción y el Comercio (CPC), para no aumentar el sueldo mínimo y, al mismo tiempo, plantean su rechazo a la modificación eventual de la negociación colectiva que tanto provecho les ha traído; por otro lado, múltiples organizaciones populares han manifestado la necesidad de que el sueldo mínimo sea único y no diferenciado como lo es en la actualidad y, a su vez, han planteado la intención de luchar por un sueldo mínimo digno, que refleje lo que realmente cuesta la vida en Chile, a partir de una nueva canasta familiar (cuestión sobre la cual algunos plantean que debiera alcanzar los $315 mil pesos).

4. El fantasma de la crisis inflacionaria Las alzas de numerosos artículos y servicios indispensables están empezando a castigar al pueblo. Esto lo podemos evidenciar en que en los últimos 12 meses la leche líquida registra un aumento de 36,6% y los demás lácteos lo hacen entre un 21% y 31%. Así también, han sufrido alzas notorias el arroz y la harina, sin olvidar el alza del pan corriente y del especial, empujados de atrás por el alza de varios insumos que podrían elevarlo más aún. Las frutas y verduras también aumentaron en los últimos 12 meses en al menos un 8,5%. Por otro lado, a nivel internacional, se muestra un alza desproporcionada del maíz y del trigo.
En cuanto a los servicios básicos, las cuentas de electricidad subieron en un 16% en el último año, aumento que se repetirá en octubre cuando se fije el nuevo precio de nudo. En los últimos 6 meses, el rubro combustibles dentro del Índice de Precios al Consumidor (IPC) ha experimentado un alza del 10%. Situación similar es la del gas licuado y del agua que han tenido aumentos con perspectivas de seguir elevándose.Y para qué referirse a los gastos en salud para las personas ya que basta decir con que los hospitales, clínicas, isapres, servicios de urgencia, farmacias y otros negocios privados no paran de elevar precios, tarifas y mensualidades.Y en materia de transporte ya es conocido y repetido el hecho de las compañías privadas del Transantiago chantajean al gobierno para que les subvencione y de esta manera asegurar sus altas ganancias ya que de lo contrario exigirían alzas en las tarifas de locomoción, cuestión que ya se ha vivido en ciudades como Concepción donde el valor del pasaje ascendió a $400 pesos.
Todo lo que hemos señalado se llama INFLACION, que significa un alza sostenida y generalizada de los precios. Los economistas del gobiernos dicen que esto es transitorio. ¿Pero es así?.Hace algún tiempo se ha desatado un proceso inflacionario en los mercados globales de los productos básicos, energéticos y derivados, materias primas y alimentos. La crisis energética mundial y los cambios climáticos son factores importantes.

5. El control de la inflación En general, la inflación puede controlarse, entre otros instrumenos, por:

El establecimiento de control de precios o bandas de precios.
La intervención del estado en ciertas áreas estratégicas de la economía (como la energía).
Interviniendo el dinero circulante, por la vía del aumento de la tasa de interés (precio del dinero que es fijado por el Banco Central). Con respecto al alza de la tasas de interés, podemos decir que este es el mecanismo de preferencia que usan los de arriba en desmedro de los trabajadores y el pueblo. Esto porque el alza perjudica a toda clase de deudores, sean estos deudores hipotecarios o los que tengan que pagar las deudas de las vacaciones, deudores de las compras de artículos escolares, los consumidores de tarjetas de crédito, comerciales y bancarias, etc.
Por otra parte, el aumento de la tasa de interés afecta a la inversión (nadie pide préstamos con tasas de interés elevadas) y con ello hay menos circulante con lo que se corrige el alza de precios. Pero, lo que en realidad ocurre es la reseción, es decir, la economía deja de crecer pudiendo llegar igual o inferior a 0% el crecimiento y con ello aparecen las medidas de ajuste empresarial como los despidos, las caídas de los salarios, la reducción del gasto social, etc... lo que afecta directamente al pueblo.

En la historia de Chile, el control de precios hasta 1973 era realizado por la Dirección de Abastecimiento y Control de Precios (DICAP) lo que fue barrido por la dictadura neoliberal ya que, según ellos, "se distorsionaba el libre juego de la oferta y la demanda". Así todo, luego crearon el Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC) cuya función principal es "informar a los consumidores". Además, la actividad empresarial del estado se eliminó por la vía de las privatizaciones brujas de las empresas estatales, cuyas acciones se vendieron a precio de huevo.

6. Las conclusiones ante este panorama La discusión sobre la redistribución del ingreso está presente en las organizaciones populares en la medida que existe la lucha por las demandas económicas. Sin embargo, la redistribución del ingreso es imposible bajo el actual orden neoliberal. Por otra parte, el deterioro de los salarios es cada vez mayor, lo que puede ser reflejo de una crisis inflacionaria mayor... ¡y solos les queda $20 mil millones de dólares para evitar que este país explote por los aires!."Corregir el modelo", "Un nuevo pacto social", eso es lo que suena, ¿pero es esto posible?, ¿es posible que los empresarios den un paso al lado para dejar de ganar sus altas tasas de dinero?, a fin de cuentas, ¿es posible humanizar el capitalismo? (como creen los reformistas cuando llaman a votar por tal o cual candidato en las elecciones).
Nosotros creemos firmemente que no. Lo que si creemos es que, hoy por hoy, las demandas económicas tienen que permitirnos acumular fuerza como pueblo para construir un nuevo proyecto económico, político y social que sea profundamente contrario al de las clases dominantes, al capitalismo. Debemos comprender que la producción de la riqueza es social y que los capitalistas se apropian del fruto de este trabajo... a fin de cuentas, el sistema está hecho por ellos, necesitaron los milicos para imponerlo y la democracia burguesa para mantenerlo. Solo depende de nosotros que la tortilla se de vuelta.

¡Arriba los que luchan!